Diversidad, equidad, inclusión y pertenencia

Nuestro objetivo es crear una comunidad querida, y esto requerirá un cambio cualitativo en nuestras almas, así como un cambio cuantitativo en nuestras vidas. – Dr. Martin Luther King, Jr. 

En NI, consideramos que la diversidad, la equidad, la inclusión y la pertenencia (DEIB) son fundamentales para nuestro éxito. Estamos en un viaje para crear lo que el Dr. King llamó una comunidad querida, donde todas las personas se sienten bienvenidas, valoradas, respetadas y escuchadas, contribuyendo a la riqueza de la humanidad al inspirar intencionalmente la pertenencia y la esperanza. Esto significa elegir una paz positiva y la presencia de justicia sobre una paz negativa, que es la ausencia de tensión. 

El lenguaje es intrínseco a la expresión cultural. Da forma a nuestra realidad, demostrando lo que es importante para nosotros, lo que creemos y valoramos. Usamos los siguientes términos en NI como parte de nuestros esfuerzos para garantizar que nuestro entorno fomente una cultura de pertenencia para todos: 

Cultura se refiere al depósito acumulativo de conocimiento, experiencia, creencias, valores, actitudes, significados, jerarquías, religión, nociones de tiempo, roles, relaciones espaciales, conceptos del universo y objetos materiales y posesiones adquiridos por un grupo de personas en el curso de generaciones a través del esfuerzo individual y grupal. La cultura, en su sentido más amplio, es un comportamiento cultivado que es la totalidad de la experiencia acumulada, aprendida y transmitida socialmente de una persona, es decir, el comportamiento a través del aprendizaje social. 

La diversidad refleja la "mezcla" individual de diferencias relacionadas, pero no limitadas a, raza, nacionalidad, etnia, género, edad, habilidades físicas, orientación sexual, situación económica, educación, profesión, religión y afiliación organizacional. La presencia de diferencias tiene como objetivo ayudarnos a mejorar nuestra innovación y toma de decisiones. La representación de grupos culturales, étnicos u otros designados se evalúa al identificar su presencia en la organización.

Equidad se trata de crear equidad o justicia en el acceso, las oportunidades, el tratamiento y el avance para todas las personas, considerando sus circunstancias únicas.  Construimos justicia en la estructura de la organización donde la identidad de uno no se convierte en el principal predictor del resultado. La equidad se evalúa eliminando las disparidades en el reclutamiento, la contratación, el compromiso, la promoción, el pago, etc., de acuerdo con la identidad de cada uno.

Inclusión refleja cómo hacemos que la "mezcla" funcione en conjunto. Establecemos estructuras, políticas, prácticas y procedimientos sistémicos para maximizar el compromiso y la contribución de diversos recursos. Esto incluye una colección de comportamientos que estamos tratando de desarrollar en cada grupo, asegurando que todos los empleados se sientan bienvenidos, valorados, respetados y escuchados. La evaluación de la inclusión está determinada por qué tan bien se valora la diversidad y consiste en el clima cultural, el compromiso, las tasas de rotación, el entorno acogedor, las percepciones de reclutamiento y retención, el enfoque en las diferencias culturales, la promoción, las desigualdades salariales y las decisiones de permanencia. 

Pertenencia es el resultado emocional de los comportamientos inclusivos que las personas quieren y experimentan en su organización, lo que alimenta que en el trabajo exista un sentido de propósito y comunidad. La evaluación de la pertenencia está determinada por qué tan bien se valora la inclusión y consiste en la seguridad psicológica, la comodidad al compartir ideas sin temor a las consecuencias negativas, sentirnos valorados y llevar nuestro auténtico yo al trabajo.

DEIB es una parte intrínseca de nuestra estrategia de impacto corporativo, anclada en nuestros valores fundamentales y vinculada a muchos de nuestros objetivos, se adopta del trabajo de la Alianza Gubernamental para la Equidad Racial (GARE). Vemos nuestro viaje hacia una comunidad más equitativa e inclusiva en tres partes.

Primera

Debemos reconocer y reparar las injusticias de prejuicio y discriminación debido, entre otros, a raza, color, género, religión o credo, origen nacional, sexo, edad, identidad de género, capacidad física o mental, orientación sexual y ciudadanía.

Aunque es posible que no hayamos sido los que cometimos los actos de prejuicio y discriminación, estamos comprometidos a crear el cambio cultural dentro de nuestra organización para poner fin a los sistemas que aíslan, maltratan, subyugan y deshonran a otras personas de diferentes orígenes culturales.  

Es esencial comprender la importancia de las experiencias sociales, en las que las personas históricamente excluidas se han enfrentado a un trato injusto debido a prejuicios. Para abordar esto, debemos comprometernos a reconocer sus luchas y brindarles la atención y el respeto que merecen, especialmente a aquellos que se han sentido marginados y pasados por alto en la sociedad debido a su origen cultural.

Segunda

Es importante encontrar formas de abordar el daño, el sufrimiento, la desigualdad y los impactos del racismo, el sexismo y otras prácticas de exclusión en la sociedad. Al implementar estas estrategias, buscamos fomentar la diversidad, equidad, inclusión y pertenencia (DEIB) dentro de la compañía.

Requiere tener un lenguaje compartido y lentes comunes que nos ayuden a identificar los problemas que buscamos resolver, así como los recursos para generar el cambio cultural que buscamos desarrollar. Esto requiere construir conexiones humanas, cuidado y compasión. También implica ser buenos administradores, valientes y asumir la responsabilidad de contribuir a un cambio cultural real y sostenible.  

Tercera

Por último, nuestro viaje continúa a través de la reconciliación como una manera de restaurar, sanar y elevar a aquellos que históricamente fueron excluidos de la sociedad. Aunque los sistemas injustos a veces han favorecido a un grupo a expensas de otros, estamos comprometidos a reconocer que los injustos procesos pueden impedirnos celebrar, honrar, involucrar y realizar plenamente nuestro máximo potencial.

Las prácticas restauradoras, anti-racistas y anti-prejuicios se convierten en el vehículo para reparar las heridas generacionales y nos permiten aprovechar más profundamente el genio natural y la riqueza de las oportunidades, el éxito y la innovación creativa.   

En la sociedad, como en los negocios, ha habido sistemas de desigualdad y exclusión que han marginado a las personas de color y a las mujeres.  

Para crear el cambio cultural que deseamos ver, nos enfocaremos en abordar las desigualdades. Esto requerirá liderazgo ejecutivo, acción dedicada y el apoyo y la participación de aquellos con experiencia vivida. Para nosotros, eso incluye:  

Usar un marco de DEIB: Este marco articula claramente DEIB; prejuicio implícito y explícito; y prejuicios individuales, institucionales y estructurales. 

Construir capacidad organizativa: Comprometerse con la amplitud y profundidad de la transformación cultural para que los impactos sean sostenibles. Si bien el liderazgo es fundamental, los cambios se llevan a cabo en campo, a través de la construcción de infraestructura que crea expertos y equipos de DEIB en toda la compañía.  

Implementar una lente de DEIB: Los prejuicios y las desigualdades no son casualidades. En cambio, representan un conjunto de experiencias que han sido creadas y sostenidas en el tiempo y no desaparecerán por sí solas. Básicamente, la lente DEIB se utiliza al cambiar políticas, programas, procedimientos y prácticas para abordar las desigualdades y al desarrollar nuevas políticas y programas. 

Estar basado en datos: Las medidas deben ser dinámicas al evaluar el éxito de cambios programáticos y específicos de políticas y también deben desarrollar puntos de referencia, establecer metas y medir el progreso. Usar datos de esta manera tiene como objetivo generar responsabilidad y transparencia.  

Colaborar con otras instituciones y comunidades: El trabajo de DEIB es necesario, pero insuficiente. Para lograr un sentido de pertenencia equitativo, diverso, inclusivo y en la organización, la empresa necesita trabajar en colaboración con socios e instituciones de la comunidad para lograr resultados significativos.  

Operar con urgencia y responsabilidad: Cuando el cambio de cultura es una prioridad, se siente la urgencia y se acepta el cambio. Construir mecanismos de rendición de cuentas de la compañía utilizando un plan de acción claro permitirá la rendición de cuentas. Colectivamente, debemos generar una mayor urgencia y compromiso para lograr un sentido de pertenencia diverso, equitativo e inclusivo. 

Hemos desarrollado un marco para ayudar a guiar nuestro viaje a través de estas tres etapas. Estos principios rectores proporcionan ese lenguaje compartido y una visión común para que todos en NI se unan: 

Principio 1: Transformar los sistemas es nuestro enfoque, no las personas. A menudo, aquellos interesados en resolver problemas comenzarán a descubrir maneras de cambiar a las personas. Esos esfuerzos no tienden a generar los resultados deseados. Por el contrario, debemos buscar formas de transformar la cultura y los sistemas enfocándonos en las políticas, los programas y los procedimientos.

Principio 2: Centrar y priorizar las voces de aquellos históricamente excluidos, con experiencia vivida y directamente impactados por las decisiones tomadas es fundamental para evitar que las personas se sientan y experimenten ser ignoradas e invisibilizadas.

Principio 3: Enfocarse en la causa raíz en lugar del problema inmediato es fundamental para crear un cambio cultural sostenible. Resolver el problema inmediato es un enfoque que atiende más a nuestro sentido de urgencia para lidiar con los desafíos a corto plazo que enfrenta la organización en lugar de los cambios culturales y de sistemas necesarios durante un período prolongado de tiempo. 

Principio 4: Centrar las prácticas y principios anti-racistas y anti-prejuicios en nuestro trabajo mientras lideramos con un enfoque en la raza/etnia y género para desafiar el cambio cultural a nivel global y local. 

Principio 5: La congruencia entre lo que hemos escrito y la experiencia vivida por las personas ayuda a crear la transparencia necesaria para garantizar la coherencia. La palabra escrita a menudo se valora y se reconoce por encima de las experiencias vividas.   

Principio 6: El compromiso de NI con la excelencia inclusiva garantiza que adoptemos un medio para la integración cohesiva y colaborativa de DEIB en nuestra búsqueda de la excelencia. Una marea creciente hace flotar a todos los barcos, y NI reconoce que nuestro éxito depende de qué tan bien valoramos, nos involucramos e integramos la rica diversidad cultural de las personas. Nos permite aprovechar la brillantez y el talento representados en todas las culturas y comunidades.  

También nos aseguramos de que los esfuerzos de DEIB estén integrados en todas las operaciones de NI. A medida que descubrimos las desigualdades sociales y culturales que las personas experimentan al desarrollar su mayor potencial, estas ayudan a proporcionar una guía para identificar programas, prácticas, procedimientos y políticas efectivos para un cambio cultural sostenido.   

Al considerar a DEIB como algo fundamental para el negocio y el bienestar de la compañía, la excelencia inclusiva ayuda a lograr y mantener la excelencia en los servicios, reclutamiento y retención, adquisición de talento, investigación y desarrollo, desarrollo del liderazgo, operaciones, funciones y compromiso a nivel local y mundial.